Imagina que eres un matrimonio en busca de tener un hijo, imagina que el sueño de cumple y una niña viene en camino, pero un día, en una consulta médica, te enteras junto a tu pareja que la mitad del corazón de tu hija no se formó, por lo que en cuanto nazca, morirá.
Esta es la situación que vivieron Mirna y Eslí, guanajuatenses que presenciaron un milagro que desafió todos los pronósticos al ver a su hija, Eliza, aferrarse a la vida.
“Ya teníamos listos los preparativos para su funeral, pero al nacer, nuestra bebé se aferró a la vida. Incluso sorprendiendo a los médicos quienes no se explicaban el porqué. Fueron minutos, horas y días… y Eliza seguía con nosotros”, contó Eslí Maldonado Cantero a través de GoFundMe.
¿Cuál era ese diagnóstico fatal?
Antes de nacer, Eliza fue diagnosticada con ventrículo derecho hipoplásico, una malformación en el corazón que impedía la correcta formación de la parte derecha. Se trata de un padecimiento congénito cuyas causas aún no se determinan con exactitud, pero que representan un reto médico difícil. Este padecimiento es tan raro que los especialistas no han podido determinar su prevalencia.
Los médicos fueron claros con estos padres de Guanajuato: al nacer, su hija no respiraría y moriría en pocos minutos. La espera del nacimiento estaba marcada por el dolor de saber que su hija llegaría al mundo solo para despedirse.
Los nuevos retos
El milagro que vive esta familia necesita ser sostenido. La vida de Eliza depende de tres cirugías en el corazón, siendo la primera la más urgente, pues el ducto que actualmente la mantiene con vida comienza a cerrarse. Sin esa intervención inmediata, no podrá sobrevivir.
“Estas cirugías son nuestra única esperanza para darle la oportunidad de crecer y tener una vida lo más normal posible. Nosotros solo queremos verla al reír, jugar, y acompañarla en cada etapa”, comparten sus padres a través de una colecta solidaria emprendida para poder costear los tratamientos descritos.
La historia de Eliza es la de un milagro que necesita del esfuerzo humano y de la solidaridad para concretarse. Su nacimiento ya cambió la vida de sus padres, quienes pasaron del dolor de preparar un adiós, a la esperanza de luchar por un futuro.
Ahora apelan a la empatía de quienes puedan sumarse con donaciones, palabras de aliento o compartiendo su historia para llegar a más personas y concretar todos los tratamientos que Eliza necesita: https://gofund.me/d6cad134